Barcazas de Londres
Mayo 2022
Las barcazas perezosas bostezaban
al sol del canal verdusco, pacientes
como cetáceos urbanos, habitados
de trastos oxidados y una cresta
de macetas despeinadas sobre el vientre,
el agua no discurría, meditaba
en su milenario camino manso,
el cielo de Londres regalaba
ese día, como por casualidad,
una cadeneta de rayos de sol
y tímidas nubes saltarinas
al caminante de sus riberas
de piedra y adoquines viejos,
canción del agua que no duerme,
en torbellinos de aire húmedo
balanceaba las agujas de mi memoria.